Cuenca: la ciudad de los cuatro ríos
Por Julio Calero
Cuenca, considerada como la tercera ciudad más importante del Ecuador, se encuentra ubicada a 2.500 msnm, en un valle de la cordillera de los Andes, situación privilegiada que hace que su temperatura promedio sea de 15º. Se encuentra a 472 kilómetros de Quito y a 243 de Guayaquil, lugares desde donde se llega a través de carreteras que se encuentran en magnífico estado, aunque con pequeños tramos que están siendo sometidos a reconstrucción pero que estarán terminados en pocos meses más, con lo que viajar por estas vías se volverá algo atractivo e interesante.
Ciudad de los 4 ríos
La fundación española de Santa Ana de los Ríos de Cuenca se realizó el 12 de abril de 1557, asentada en la planicie llamada antiguamente por los cañaris como Guapondelig, a la que posteriormente los incas denominaron Tomebamba; en ella nació el emperador incaico Huayna Capac. Cuenca es conocida también como la ‘Ciudad de los cuatro ríos’ por estar rodeada de cuatro corrientes de agua dulce, limpia y fría, que se originan en el nudo del Cajas, sus nombres son Tomebamba, Machángara, Tarqui y Yanuncay, nombre este último inmortalizado en la canción ‘Chola Cuenca’, que es como un himno de la ciudad.
Patrimonio Cultural
La ciudad fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad el primero de diciembre de 1999 y tres días después fue inscrita en la lista de Bienes Patrimoniales de la Humanidad. Esta designación fue un reconocimiento a su arquitectura, vestigios arqueológicos, al arte y la literatura cultivados por sus hijos, a sus artesanías y a su orfebrería entre otras motivaciones, que en su conjunto hacen de Cuenca una ciudad acogedora para quienes la visitan y que además de disfrutar del calor de su gente, también tienen la oportunidad de participar en sus fiestas, comidas, recreaciones, recorridos por sus numerosas iglesias así como por los sitios aledaños que la rodean.
Las catedrales de Cuenca
Cuenca tiene en pie dos catedrales, la más antigua es denominada la Catedral Vieja y su construcción por parte de los españoles comenzó por el año 1557, utilizándose en su edificación piedras incas del Palacio de Pomango y mármol. En su interior se encuentran varias figuras de tamaño natural que representan la escena de Jesús y sus doce discípulos durante la Última Cena, así como otra representación que traslada a los visitantes hasta el momento en que Cristo ya ha sido bajado de la cruz luego de haber expirado y algunas personas, entre ellas su madre María, se aprestan a darle sepultura, su nombre es El Descendimiento. Ambas obras fueron creadas por el artista Gaspar Sangurima.
En la actualidad la función de la Catedral Vieja es servir como escenario para conciertos y eventos culturales luego de habérsele efectuado algunas reparaciones que culminaron en el año 2004. Considerándose la necesidad de que Cuenca contara con una nueva catedral, en 1880 se empezó la construcción de una nueva, en la que se utilizaron alabastro y mármol, esta catedral es la que actualmente se utiliza para celebrar los principales ritos religiosos de la ciudad. El proyecto de construcción se fue haciendo realidad a través de muchos años hasta su terminación en 1967. A esta se la conoce como la Catedral Nueva o de la Inmaculada.
Tejedoras de paja toquilla
Dentro de las actividades artesanales que se desarrollan en Cuenca es muy conocida la elaboración de los sombreros de paja toquilla que, llevando diversas marcas nacionales, dan la vuelta al mundo para orgullo del Ecuador, aunque todavía existen personas que creen que dichos sombreros son elaborados en Panamá, grueso error inducido por el uso que hizo de este sombrero mucha gente que trabajó en la construcción del canal de Panamá para protegerse de los rayos del sol y que los adquirían en los comercios panameños que lo importaban desde el Ecuador.
Los sombreros son elaborados en base a la paja toquilla (Carludovica palmata), que es llevada desde otras regiones del Ecuador, como Manabí, Esmeraldas, Guayas y la provincia amazónica de Morona Santiago. Luego de que las hojas de la palma son divididas en delgadas fibras para ser puestas a secar al sol, llegan a las hábiles manos de las tejedoras, popularmente conocidas como cholas cuencanas, quienes con mucha paciencia y destreza dan forma a este sombrero reconocido como una de los más finos del mundo tanto por su elegancia como por suave textura.
Cuenca y los sombreros

Con la paja toquilla no solamente se elaboran sombreros, también se confeccionan bolsos, carteras, vinchas para el pelo, collares, adornos, canastas, abanicos y hasta vestidos de novia como es el caso de la empresa Homero Ortega, fabricante de distintos elementos de paja toquilla, situada en la Gil Ramírez Dávalos, detrás de la Terminal Terrestre de Cuenca.
La elaboración del sombrero consta de tres partes: la plantilla, que es por donde se comienza el tejido; la copa y la falda. El trabajo del tejido se lo realiza manualmente y luego que está terminado, para darle forma al sombrero, se lo coloca sobre un molde de caucho antes de ubicarlo en una máquina que mediante calor y presión le da la forma estructurada en el molde. Para proteger al sombrero, a su alrededor se le coloca un cintillo de cuero. Dando forma al sombrero. No muy lejos de Cuenca se encuentran las poblaciones de Chordeleg y Sigsig, reconocidas por la habilidad de sus artesanos que trabajan en metales preciosos como el oro y la plata, así como también por su alfarería.
Hay que recalcar que los sombreros de paja toquilla son Patrimonio de la Humanidad, de UNESCO.
Panama Hat

El modelo más conocido en el mundo, es el Panamá Hat elaborado en Ecuador. Sin embargo, existía la duda de su procedencia por el nombre. Eso se debe únicamente a que fue usado por todos los trabajadores que construyeron el Canal de Panamá, para defenderse de los mosquitos. Este sombrero se puede lavar y doblar dentro de una caja de madera que se ofrece en las tiendas del rubro. Un sombrero de estos puede costar desde US$ 50 a US$ 5.000. Los turistas repletan las tiendas donde se ofrecen las más diversas formas y colores.